El Gobierno envió al Congreso un proyecto que busca eliminar las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), aunque aún no define si se tratará en sesiones extraordinarias. La propuesta fue impulsada por Santiago Caputo y redactada por María Ibarzábal, con cambios que incluyen la reducción de aportes públicos a partidos políticos y ajustes en las reglas de campaña. Pese a la resistencia de la oposición, en la Casa Rosada confían en lograr consenso, argumentando que podría beneficiar a ciertos gobernadores y sectores del peronismo.
El PRO y la UCR rechazan la medida, afirmando que necesitan las PASO para organizar sus espacios políticos. Sin embargo, dejaron abierta la posibilidad de analizar el proyecto. En tanto, la relación del Gobierno con sus aliados está tensa debido a las negociaciones fallidas por el Presupuesto 2025, lo que complica el escenario legislativo.
El Ejecutivo defiende el proyecto señalando que las PASO generan un gasto innecesario que podría reasignarse y propone cambios en el financiamiento de partidos, endureciendo requisitos para su continuidad y eliminando espacios de publicidad gratuita, lo que podría impactar negativamente a los partidos pequeños. Aun así, se facilitaría la afiliación digital como única medida para incentivarlos.
Inicialmente, los libertarios veían la eliminación de las PASO como un recurso para negociar el Presupuesto, pero el rechazo de gobernadores a los ajustes propuestos llevó a un cambio de estrategia. Ahora, el Gobierno busca avanzar con el proyecto, considerando que su aprobación es más viable en el próximo período legislativo.