
En 2024, YPF consolidó su posición como líder en la producción de petróleo no convencional en Vaca Muerta y como principal exportador de crudo del país. La empresa alcanzó una producción shale promedio de 122.000 barriles diarios, lo que representa un incremento del 26% en comparación con el año anterior, cumpliendo así con su objetivo de superar los 120.000 barriles diarios. En los últimos meses del año, la producción llegó a 138.000 barriles diarios.
Las exportaciones de petróleo, principalmente dirigidas a Chile, promediaron 35.000 barriles diarios en 2024, un aumento del 174% respecto al año anterior. Este crecimiento en las exportaciones contribuyó significativamente al superávit energético del país.
Las reservas de shale P1 de Vaca Muerta alcanzaron 854 millones de barriles de petróleo equivalente en 2024, un incremento del 13% en comparación con el año anterior, representando el 78% del total de reservas de la compañía. La tasa de reemplazo de reservas fue de 1,9x, lo que indica que las actividades shale de la empresa permitieron que las reservas crecieran casi al doble de lo extraído durante el año.
Financieramente, YPF cerró 2024 con sólidos resultados, registrando un EBITDA ajustado de 4.654 millones de dólares, lo que representa un crecimiento del 15% impulsado por la recuperación del precio local de los combustibles, mayores ingresos por exportaciones de petróleo y la expansión del shale oil.
Las inversiones totalizaron 5.041 millones de dólares en 2024, alineadas con el plan estratégico de la compañía. Del total invertido, el 63,5% se destinó al desarrollo de recursos no convencionales, principalmente en Vaca Muerta.
Estos resultados reflejan el éxito del Plan 4×4 implementado por YPF, que busca transformar a la compañía en una empresa de clase mundial en el sector del shale y posicionarla como una gran exportadora de hidrocarburos para el año 2030.